Consta de varias fases:
Impulsión en la pared. Cuando suena la señal de salida, el nadador echa su cabeza hacia arriba y hacia atrás dirigiendo su mirada hacia el otro lado de la piscina. A su vez el cuerpo se impulsa hacia arriba y hacia atrás. Los brazos se impulsan hacia arriba y hacia atrás y las piernas continúan impulsándose en la pared hasta la completa extensión. Los pies en el instante de dejar la pared, tienen una extensión en los tobillos , que le proporciona al nadador una impulsión final.
Entrada. Es el punto máximo de arqueo de la espalda y el momento de la entrada en el agua. Serán las manos lo primero que entre en el agua, seguido de brazos, tronco y piernas. Es el momento de inhalar aire para la inmersión. En este momento, el nadador está a punto de completar la entrada y ya ha adoptado una posición hidrodinámica, consiguiendo así un deslizamiento efectivo. Una vez que el cuerpo está totalmente sumergido, el nadador podrá mover sus piernas con varios batidos de delfín antes de salir de nuevo a la superficie y comenzar a nadar.
Deslizamiento y batida. Justo después de la entrada, hay que levantar las manos para cambiar la dirección o corregir la profundidad. Antes de que el nadador pierda parte de la velocidad adquirida, deberá efectuar algunos batidos, bien de delfín o bien de crol,(dependiendo de las preferencias del nadador) pudiendo realizar hasta 15 metros de nado sumergido. Para salir a la superficie comenzará batiendo los pies de espalda en dirección a la superficie.
Propulsión hacia la superficie. El nadador ya en la superficie, comienza a dar la primera braza con un brazo aún extendido por encima de la cabeza.
Aquí finaliza la salida y comienzan los ciclos normales de brazos.
Y para finalizar un vídeo donde podemos apreciar mejor estas fases.
https://www.youtube.com/watch?v=m7-BDbaDJzA